En 1860 James Clerk Maxwell insistió en la veracidad de la teoría de los tres receptores de Thomas Young como base biológica de la visión de los colores. Concebía los tres colores fundamentales de Young como vértices de un triángulo plano que contenía todos los colores espectrales.
Según Maxwell, fijando tres colores estándares en el diagrama de Newton y usando la regla del baricentro, se podrían calcular todos los colores que sean una mezcla de cantidades dadas de esos tres colores estándares y se puede construir una forma triangular del diagrama cromático, que Newton, en una primera aproximación, había dibujado en forma de círculo.
Maxwell fue pues el primero en establecer con medidas efectivas el diagrama circular de Newton. Su trabajo permitió dar a cada color —que estuviera en el interior del triángulo— dos coordenadas basadas en tres colores estándares elegidos.